Barça gastó 60 millones en Roque, Xavi confío en Lewandowski y erró un insólito gol

Barcelona y Osasuna están presentando un partido muy parejo en Arabia, quien gane hoy se enfrentará al Real Madrid el domingo en la final de la Supercopa de España. Después de un gran inicio, el Barcelona aminoro la marcha y Osasuna comenzó a generarle dolores de cabeza al equipo blaugrana, que se nota sigue tambaleante en el aspecto defensivo a pesar de que presenta a todos los titulares hoy.

Pero iban 12 minutos cuando Sergi Roberto tomó el balón y llegó hasta la puerta del área para terminar cediendo la posesión a Lewandowski a su izquierda. El polaco llegó al Barcelona para hacer goles, pero esta temporada está defraudando a todos y en esta ocasión no se redimió. El ex Bayern Múnich abrió el pie para colocar el balón al palo más lejano del portero Herrera, pero quien defiende los tres palos del Osasuna contuvo el balón.

Xavi sigue confiando en Lewandowski a pesar de la estelar llegada de Vitor Roque. El brasileño llegó al club por 60 millones de euros y la afición se ilusionó desde el primer minuto en que conoció su fichaje, pero aun así el entrenador ha decidido que sus comienzos como blaugrana sean a partir del banquillo de los suplentes. Tuvo minutos contra Las Palmas y contra Barbastro, pero siempre desde el banquillo.

Lewandowski aún tiene crédito como para que Xavi mantenga la confianza en él, pero él mismo podría terminarse si el polaco sigue defraudando. Xavi admitió que su equipo tiene problemas en ambas áreas, problemas de contundencia y para solucionarlos, en el área rival, necesita precisión, algo que el polaco no está teniendo en esta temporada. En Barcelona esperan más de él y el tiempo se agota.

Como Toni Kroos, Herrera es quien recibe pitidos hoy en Arabia

El portero del Osasuna es quien hoy recibe pitidos cada vez que interviene en el partido. Quien defiende los tres palos dejó en claro su relación con la grada desde la primera jugada del partido, cuando logró tapar un gran remate de Christensen, Herrera se paró frente a todos los aficionados de detrás de su portería y les celebró su acción en la cara. Como ayer lo fue Toni Kroos, hoy es Herrera el pitado por todo el estadio.